Las empresas que operan en los muelles de Ferrol y San Cibrao movieron de abril a junio 2.812.864 toneladas de mercancías, 214.181 más que en el mismo período de 2019.

El buen comportamiento de los mercados del GNL y la bauxita palía el cese de las importaciones de carbón. 

En el global del primer semestre el descenso del volumen de cargas y descargas se sitúa algo por debajo de los 15 puntos porcentuales.

Ferrol, 17 de julio de 2020

La actividad en las instalaciones de la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao aumentó un 8,3 % durante el segundo trimestre de 2020, en comparación con el mismo período de 2019. De este modo quedó compensado parcialmente el acusado descenso que se había registrado en el intervalo enero-marzo. Abril comenzó con una bajada acumulada en el balance de tráficos de 32 puntos porcentuales y en el inicio de julio el retroceso arrastrado se ha situado en menos de la mitad.

Según datos todavía provisionales, las empresas que operan en los muelles de Ferrol y San Cibrao movieron entre el 1 de abril y el 30 de junio de este año 2.812.864 toneladas de mercancías, frente a las 2.598.683 contabilizadas en iguales fechas del ejercicio anterior. Este incremento (214.181) se produjo a pesar de haber perdido la Autoridad Portuaria el que hasta la primavera de 2019 era su principal tráfico, el de importación de carbón, y también pese a los efectos de la pandemia del coronavirus sobre la navegación mundial. El avance se explica, fundamentalmente, por el buen comportamiento de los mercados del gas natural licuado (GNL) y la bauxita.

En el global del semestre inicial de 2020, en cambio, los movimientos en los muelles de la Autoridad Portuaria alcanzaron una magnitud de 5,21 millones de toneladas, lo que supone una caída del 14,9 % respecto a los registros de 2019 (6.122.597). De esos 6,12 millones de toneladas cargados y descargados en la primera parte del año pasado, 1,99 habían sido de carbón.

La bauxita lidera el ránking de mercancías del período enero-junio de 2020, con 2.481.567 toneladas, seguida por el GNL, con 653.269. La clasificación la completan en sus puestos altos la alúmina (630.347), el fueloil (213.816), la sosa cáustica (163.530), la madera (163.395), los aceites (160.120), la chatarra (126.553), el biodiésel (120.144) y el acero (86.069).

Entre los grandes tráficos, en términos relativos sobresalen las evoluciones del GNL, con un repunte del 127,4 %, y del fueloil, la madera y la sosa cáustica, con subidas, respectivamente, del 29,8, el 24,6, y el 21,1 %. También evolucionan la bauxita (19,6 %), los aceites (17 %), el biodiésel (16,4 %) y la alúmina (6 %).

En el resto del desglose de la estiba y desestiba merecen mención destacada también los movimientos de contenedores, con un avance del 3,5 % si se mide en toneladas (de 46.970 a 48.599) y del 17,6 % si se estima en TEUs (de 4.026 a 4.734).

“Empezamos a compensar en nuestros balances la pérdida del carbón por el cese de actividad en As Pontes, si bien es cierto que nos queda un largo recorrido aún para poder igualar la importancia que estas importaciones tenían para la Autoridad Portuaria”, valora el presidente de la misma, José Manuel Vilariño. Asimismo, agrega: “El panorama para los próximos meses vendrá determinado por la incertidumbre que genera la crisis del covid-19 y, sobre todo en nuestro caso, por las respuestas a sus necesidades que pueda obtener la industria electrointensiva”.